Once de los 12 policías estatales de Tamaulipas acusados por la masacre de Camargo, cometida en enero del 2021, cuando 19 personas fueron asesinadas y calcinadas (la mayoría migrantes guatemaltecos), fueron declarados culpables de homicidio calificado, abuso de autoridad y delitos cometidos en el desempeño de funciones administrativas.